domingo, 9 de agosto de 2015
Vídeo "Días de Campo - Capitulo 12 - Mercados campesinos"
Publicado el 9 ago. 2015 por Agencia Prensa Rural
En Colombia la minería de oro se practica desde antes de la invasión española. Sin embargo, con la llegada de los españoles, se profundizó esta práctica con esclavos traídos desde África, indígenas sometidos, criollos sin más posesión que su fuerza de trabajo; ellos fueron los primeros que buscaron el oro que estaba contenido en las montañas y ríos del territorio colombiano.
El oro estaba en diversas regiones de la geografía nacional. Una de esas regiones fue Antioquia, departamento en donde hoy día se sigue practicando esta minería. Se sabe que a la fecha, poco más del 70 % del territorio del departamento está solicitado y titulado para emprender trabajos de exploración y explotación minera, sus montañas son un botín con el que quieren hacerse empresas extranjeras como La Grand Colombia Gold, Frontino Gold Mine y Mineros S. A.
Se pueden distinguir tres tipos de minería: barequeo, minería de veta y gran minería, las dos primeras hacen parte de lo que se conoce como pequeña y mediana minería, mientras que la gran minería requiere de alta tecnificación y de la utilización de una variedad de maquinaria pesada.
La pequeña minería ha sido una práctica tradicional de los habitantes del territorio del Nordeste antioqueño y el Bajo Cauca. El barequeo, que no es sino la extracción del oro mediante una batea, y la minería de veta, son dos formas tradicionales de minería que generan un impacto ambiental mínimo, que de la mano de especialistas puede ser fácilmente subsanado.
Los pequeños mineros padecen la persecución estatal, pues su labor se realiza en territorios cuyos titulos mineros estan en manos de empresas extranjeras.
De la pequeña y mediana minería viven cientos de familias del nordeste antioqueño, esto ha generado la perdida de la soberanía alimentaria y la tradición cultural campesina, por ello los campesinos que saben que la única opción sigue siendo la pequeña minería sostienen que se requiere de investigación y educación para generar menos impactos ambientales, subsanar los existentes y recuperar la memoria campesina.
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